viernes, 27 de febrero de 2009

Bailando con tu sombra

¿Quién podrá quererte como yo te quiero, amor?
¿Quién, pregunto quién, podrá quererte como yo?
Siempre lo decías y me atabas a tu piel
Con ramos de besos y escuchábamos caer
Sobre los techos de zinc,
Lluvias de otoño en abril...

...Yo te desnudaba para ver cómo era el mar,
Y el mar se enredaba a mis deseos de volar.
Íbamos tan lejos que olvidábamos volver
Nos traía el ángel ciego del amanecer
Y se acostaba a tus pies
Como una gatito siamés...

...Esta noche quiero que bailemos otra vez
La canción que el viento nos cantaba en el ayer.
Ya sabría el infierno cómo hacer para aceptar
Que baile en mi celda con tu sombra sin parar
¿Cómo he podido matar a quien me hacía soñar?.

V. Heredia.

sábado, 21 de febrero de 2009

Caiga, pues, sobre mi, el afilado rizo del fuego...

¡Caiga, pues, sobre mi, el afilado rizo del fuego; conmuévase el éter con el estampido del trueno y el huracán de los vientos desatados; que la tormenta sacuda la tierra en la raíz misma de sus hondos cimientos; que invadan las olas del mar con bárbara furia los celestes caminos de los astros; que arraste mi cuerpo el irresistible torbellino de la necesidad hasta el fondo del negro tártaro!
¡Como quiera, no podría darme por vencido!
(Esquilo).

jueves, 19 de febrero de 2009

El Mundo de ficciones (Miedo al caos)

Ya lo dije, nos gusta tener un suelo firme, tener todo bajo control, poder prever, encontrar un orden. Pero si en vez de sentir ese suelo firme, imaginemos que este suelo retrocede ante nosotros y nos lleva a lo incierto, imaginemos que ya no hay soportes, que hay solo telarañas que se deshacen bajo nosotros. Nada tentador ¿verdad? Así pareciese que nos ocurre al pensar en que no hay un orden, no hay respuestas…la sola idea hizo que “sonrisa meneante” subiera la guardia ¿Que pasaría si te llevaran 5 tipos a una prisión, de la noche a la mañana, te castigaran, te hicieran cavar un hoyo de 10 metros de profundidad y cuando terminas te dicen que lo tapes con la misma tierra, que te azotaran sin razón y te aprisionaran? Indudablemente buscaríamos la razón...el motivo...una respuesta porque la necesitamos.

Queremos y necesitamos la seguridad de que nada se nos escape, y así nuestra defensa comienza con el deseo de un mundo y un universo limitado, definido y esquematizado. Pero resulta que tal vez no todo es así...quizás nada es así y la naturaleza devela el carácter caótico de la existencia.
Sin embargo, para garantizarnos y para no hallarnos tan perdidos creamos representaciones y ficciones útiles. Por eso es que nuestro mundo lo conocemos necesariamente con engaños, ilusión, perspectiva, interpretación, apariencia, artificio. Ya que no es posible para nosotros asir la realidad en un sentido nouménico, no podemos conocer la "cosa en si" como verdad pura y directa, es imposible conocerla fuera de nosotros, al momento que la piensas pasa a ser tu interpretación, tu artificio. No tenemos acceso a las respuestas, a la verdad, más bien tenemos acceso a metáforas, representaciones, metonimias, antropomorfismos que son sistemáticamente usados por nosotros y los asumimos como la realidad misma, fija y constante. Es como si fueran ilusiones y nos hemos olvidado que lo son, metáforas gastadas que se transforman en realidad. Como una vez dijo Nietzsche, estas "respuestas" o "verdades" son ficciones, que a su vez son interpretaciones y a su ves son perspectivas. Pero eso no es lo que realmente me interesa decir, porque estas ficciones están vinculadas a un deseo por darle un significado al mundo ante la debilidad y el miedo que sentimos a la incertidumbre. A la caoticidad necesitamos imponerle orden, pero es imposible...no lo tiene. Una fiel prueba de esto es que todo hombre se obligado a lazarse sobre el mundo tejiendo una red de intenciones y significados que darle al mundo. Si el mundo tuviera una intención no habría necesidad de intencionarlo, si el mundo tuviera significado no habría necesidad de significarlo. De esta forma el lenguaje se hace una forma débil de tratar de controlar lo existente, porque lo esencial no lo podemos controlar...lo mismo con la ciencia, necesitamos buscar el origen de las cosas, para inventarnos un nuevo cuento, tenemos la necesidad de creer en causa-efecto para tranquilizar nuestras pobres almas y asi con todo. Todo esto es como ponerse una máscara ante el miedo al caos, con luces en los ojos para que nos pareciese esquematizado, porque lo necesitamos para vivir, porque la ficción se hace indispensable, porque ya es habitual en nosotros...
Pero como dice Nietzsche "el hecho de que ahora esta ficción sea habitual e indispensable, no prueba en modo alguno que no sea algo imaginado; algo puede ser condición para la vida y sin embargo falso."

lunes, 16 de febrero de 2009

Vida, ficción y sueños

Nuestras vidas, como humanos no son más que un sueño, una ficción; muchos ya han pensado y hablado del sistema de ficciones que generamos ante la incertidumbre en nuestra vida...y de manera angustiante, esta idea no deja de perseguirme.
A veces me detengo a analizar como ridículamente nos respondemos ciertas cosas con algo absolutamente inventado, probablemente sea una limitación. Pero depositamos toda nuestra confianza y nuestra convicción en ciertas soluciones que nos da la ciencia (o cualquier tipo de respuesta en realidad) y a veces no me parece más que un tibio esfuerzo por inventar una respuesta (ya que nos angustia mucho vivir sin respuestas) que realmente no se logra encontrar. Toda esta incertidumbre, esta nubosidad de respuestas me deja absolutamente mudo, amigos míos.
Pero después...vuelvo a concentrarme y me doy cuenta que dentro de esto hay cierto mundo bello. Si, porque este mundo fantástico que nos creamos llevados por nuestros medios, nuestros deseos, nuestros presentimientos, no es de nadie más que nuestros...a pesar de que no sea real. Es como un mundo de todo-nada, donde todo flota y se mezcla entre una nube espesa, y no hago más que encantarme ante ese caos de sueños y entro en ellos sonriendo.
Si, podrán ser sueños, podrán ser ficciones, podrán ser inventos, podrán ser mentiras...pero son nuestras y estarán siempre que se les necesite.

jueves, 12 de febrero de 2009

¿Carpe diem?

Pareciese ser que siempre es un buen tiempo para enmendarse, para quitarnos defectos, para subsanar nuestra tristeza, nuestros errores. Si, Porque tristemente una vez que te exprimes caen todas las heces del mal que nos toca vivir. Pero por esta misma razón (que siempre encontramos cosas malas en nosotros) pareciese que siempre podemos olvidar lo pasado y gozar el presente...una especie de "Carpe diem".
Mucha razón tenía un amigo y compañero cuando me dijo que los hombres sentirían menos el peso de sus penas, sus miedos, sus tristezas si no ocuparan tanto tiempo y tanta imaginación en, sistemática y empeñosamente, recordar los males que se han vivido y más bien utilizaran ese empeño, tiempo e imaginación en conseguir con urgencia los medios para hacer un poco más soportable el presente, que pareciese no ser muy alentador y gratificante.
Que ingenuamente sencillo pareciese vivir el presente, el día a día y disfrutarlo...pero lamentablemente no solo nos acecha el presente con los conflictos actuales, sino también nos amenaza continuamente el pasado y por si fuera poco...no, mejor no hablar del futuro en este texto.
Si alguien tiene una receta para hacer más soportable el presente...os ruego me la hagáis llegar.

lunes, 9 de febrero de 2009

¿Porqué será...?











¿Por qué será que uno fabrica sus recuerdos y luego los olvida?
¿Por qué será que unos procede de algún Dios para volverse ateo?
¿Por qué será que la luna tiene una barriga blanca?
¿Por qué será que cuando abro el ropero las mangas me saludan?
¿y que tu boca dice ternuras tan sólo cuando callas?...
¿Por qué será que si decido morir nadie me cree?
¿Por qué será que los pájaros cantan después de los entierros memorables?
¿Por qué será que si beso tu beso me siento renovado?
¿Por qué será que me haces tanta falta? (M. B.)

jueves, 5 de febrero de 2009

El verbo se hizo carne (Luis E. Aute)

El Verbo se hizo carne tuya y carne mía...
y se conjugó entre nosotros...nosotros.